Parque Nacional Salar de Huasco | Región de Tarapacá


Ubicación del Parque Nacional Salar de Huasco

El Parque Nacional Salar de Huasco se encuentra aproximadamente a 4000 metros de altura sobre el nivel del mar, en el altiplano chileno, entre el límite noreste de Chile y suroeste de Bolivia, a unos 176 kms al este de la ciudad de Iquique.

Su extensión llega casi a los 111.000 hectáreas. Pertenece a la comuna de Pica y desde su inauguración- el 5 de junio de 2010- se suma a los dos atractivos naturales de la región de Tarapacá, la Reserva Nacional Pampa del Tamarugal y el Parque Nacional Volcán Isluga.
Cómo llegar al Parque Nacional Salar de Huasco

Debido a la gran altura y el sector inhóspito en el que se encuentra, no es fácil acceder al lugar. No hay locomoción directa, por lo que se debe realizar un viaje al pueblo más cercano.
Las principales vías de traslado son: tomar un colectivo desde Iquique a Pozo Almonte o un bus desde el Terminal de Iquique a la localidad de Pica.

Desde cualquiera de estos lugares se debe continuar en vehículo privado, por la ruta que va hacia la minera Doña Inés de Collahuasi y luego acceder a la Ruta A-685, que llega hasta el parque.
No está permitido acampar dentro del parque, pero existe un refugio o caserío cercano a éste, Collacagua, el que ofrece cómodo alojamiento a los visitantes.
Historia del Parque Nacional Salar de Huasco

El Salar de Huasco parece ser vestigio de un lago salado del período Pleistocénico, el que se habría extendido desde el Lago Titicaca, en el sur del Perú y el suroeste de Bolivia, lo que hoy conocemos como parte de Antofagasta, Chile.
Sus condiciones climáticas y geomorfológicas no han permitido el asentamiento humano por completo. Sólo la cultura prehispánica del pueblo Aymara logró desarrollar parte de su vida en las cercanías al lugar.
Los aymaras han asociado muchos de sus mitos y rituales más importantes al Salar de Huasco, pues poseen una fuerte conexión cultural y religiosa con la flora y fauna de esta árida región.
Además, el Cerro Charcollo es el principal lugar arqueológico del sector, pues en éste se aprecian algunas ruinas de la cultura preincaica Tiahuanaco.


Flora del Parque Nacional Salar de Huasco

La gran altura en la que se encuentra el Parque Nacional Salar de Huasco, ha favorecido el sistema pluvial del sector, generando lluvias esporádicas, las que permiten la aparición de pequeños humedales.
Estos bofedales (humedales) se mantienen gracias al afloramiento de napas subterráneas, permitiendo el surgimiento de vegetación hidrofítica.
Esta vegetación comienza a aparecer desde el borde que separa el agua del humedal y el resto de la tierra, trepándose por esta última. Esto genera la ilusión de estar viendo algo similar a un colchón verde, el que está compuesto por distintos tipos de líquenes y musgos.
Fauna del Parque Nacional Salar de Huasco

La fauna está compuesta por aves acuáticas como la huallata y la gaviota andina, las que se reúnen en torno a los humedales y, principalmente, Laguna de Huasco.
Se pueden encontrar tres tipos de flamencos: el chileno, el andino y de james. También hay patos silvestres, búhos reales y suris o ñandú.
Además, predominan los mamíferos roedores como la chinchilla, el cuy de la puna y el tuco-tuco.
Los principales animales de la zona son los camélidos americanos o auquénidos, como la llama, la alpaca, la vicuña y el guanaco; pues ayudan a los pequeños asentamientos humanos- que aún quedan en el sector- en la solvencia de necesidades básicas, proporcionándoles carne y lana.

Atractivos del Parque Nacional Salar de Huasco

El Parque Nacional Salar de Huasco, en su totalidad, es un lugar lleno de maravillas morfológicas y naturales pero, ciertamente, su principal atracción son los flamencos chilenos. Llenos de majestuosidad y belleza en su plumaje rosado, estas aves le dan un tinte de color y vida a un paisaje árido y descolorido, pero no menos hermoso.